Ago 29 2012

Vídeo Travesía del Mediterráneo

Y aquí el vídeo de la travesía del Mediterráneo a vela. 500 millas de navegación doblando tres de los cabos más prominentes de la costa de levante a bordo del Archambault A40 de A Vela.

Tienes fotos en el post anterior.


Ago 8 2012

Travesía Mediterráneo a vela, la ruta de los tres cabos

En una travesía por el Mediterráneo a vela, navegando hacia el estrecho de Gibraltar, doblar un cabo siempre tiene un componente de incertidumbre; la mayoría de veces encuentras un aumento de viento, o un role inesperado, o una dirección del oleaje distinta que te condiciona el trimado y a veces el rumbo. Eso los convierte en obstáculos interesantes desde el punto de vista de estrategia de navegación. En función de la previsión méteo, doblar un cabo puede complicarnos la navegación, o suponer un descanso tras una navegación dura si nos proporciona abrigo del viento y el mar. Sea como sea conviene tenerlos en cuenta al planificar una travesía.

Para seguir practicando y aprendiendo voy a aprovechar una inesperada semana de vacaciones y embarcarme en el Mr Swing, el Archambault A40 de A Vela, que hace su ruta veraniega hasta las Islas Canarias, y vuelta a Barcelona. Yo no me puedo permitir tantos días, pero les acompañaré hasta Almería, que ya es un buen tramo. Cabo la Nao, cabo de Palos y cabo de Gata serán los tres hitos de mi travesía.

Ruta de la travesía Mediterráneo a vela. Los tres cabos

¿Que tiene de diferente esta travesía?

Primero, el velero, es un modelo regatero con un diseño que potencia las sensaciones, las prestaciones y la seguridad. Con una relación lastre/desplazamiento importante, que le permite «aguantar mucha vela» y por tanto navegar más deprisa que otros veleros con las mismas condiciones de viento. Para conseguirlo, además de tener bastante plomo en el extremo de la quilla, elimina muchos objetos decorativos supérfluos dentro del barco. Esto significa que no tiene tanta madera, ni detalles de confort como un barco de crucero típico, aunque si dispone de baño, cocina, camarotes como cualquier otro, pero reducidos a lo mínimo necesario. También tiene un casco bastante plano que le hace surfear las olas con facilidad cuando los vientos son portantes. Un barco hecho para navegar con el confort justo, pero disfrutando el doble de la navegación.

Segundo, el patrón. A Aitor hace ya tiempo que lo conozco, y ha sido uno de los «culpables» de mi afición por navegar. En todas las salidas que he hecho con él he terminado con la sensación de haber aprendido cosas nuevas, fuese cual fuese el nivel que tuviera yo en cada momento. Así que para una travesía larga, por costas desconocidas para mi como ésta, creo que de nuevo será una buena opción.

Serán casi 400 millas náuticas en una semana. Tiempo sobrado con un barco así, si encontramos viento suficiente. El plan es trazar un rumbo de cabo a cabo, pero en función de los partes méteo, que el Mediterráneo a vela ya se sabe, podemos hacer una navegación más costera, o saltar a Baleares, para volver a cruzar el canal de vuelta a la Península… ya veremos. El caso es practicar navegación, disfrutar de un barco puntero y seguir metiendo millas al contador, porque a navegar se aprende navegando.

Por cierto, quedan un par de plazas libres, ¿te apuntas?


Dic 26 2009

Solsticio de Invierno

Este lunes por fin pudimos trasladar al INXS! Habíamos quedado la semana, pero una previsión de gregal de 30 nudos nos hizo desistir. Y menos mal, porque en el Cap de Bagur se registraron rachas de casi 50. Ya lo cruzamos con el 35 pies un día con 20 knt; no quiero imaginar las olas que se deben montar con más del doble de viento.

Bueno, al lío, esta vez teníamos vientos portantes de SW, que se quedaron en una popa redonda al poco de salir del RCNB (tuvimos que esperar a las 0900 a que abriesen el puente del Maremagnum). Eso hizo delicado el manejo de la caña para evitar trasluchadas, y no nos podíamos fiar del piloto, así que tocó llevarlo a mano. Suerte de Jordi, que es un máquina y no se despistaba un momento a pesar de las olas cruzadas, el foque en orejas de burro y las roladas constantes. Librando las islas Formigues con el A31Hacía años que no pasaba tanto frío. Ni entrando en la cabina y tapado con una funda de vela conseguí dejar de tiritar. Tanto que cuando nos alcanzó el frente a media tarde agradecí esos grados más de temperatura y ya no importaba tanto la llovizna que caía intermitente durante todo el día. Al cruzar entre tierra i las islas Formigues ya teniamos 20 nudos de viento aparente que nos hacía planear a más de 10 en las olas que entraban por la aleta.

Al oscurecer, cosas del solsticio, dejamos las islas Medas bien cerca por babor porque las boyas interiores tenían una luz muy débil y no se veían hasta estar encima. El viento de unos 15 nudos, se volvió muy racheado al entrar desde tierra, y nos hacían trabajar a fondo la escota y la contra de la mayor para mantener el control cuando cargaban las rachas de 25 y 30 nudos. Alguna planeada a 13 knts!  Sorprendente lo que aguanta el barquito este, y son sólo 31 pies!

A mitad de bahía de Rosas amainó el viento y acabamos poniendo una punta de motor para poder llegar a tiempo de cenar. Los ojos bien abiertos para identificar una piscifactoría que se les ha ocurrido plantar en la línea recta entre el último cabo y la bocana del puerto y que tiene unas luces que se confunden con las de la costa. A las 2000 ya estábamos amarrando. En total 11 horas para unas 80 millas, que nos da una media de más de 7 knts. En el puerto nos trataron de lujo con sopa caliente y entrecot que nos hizo olvidar al instante el frío pasado. Y de postre Taps de Cadaqués, ¡recomendados!

Qué he aprendido: Abrigarse bien es poco. Si el día es húmedo y frío hay que abrigarse mucho… más que mucho. Si te cala el frío hasta los huesos ya es muy difícil entrar en calor.

En cuanto a las rachas, ya lo dicen, el barco aguanta si aguanta la tripulación, así que me buscaré un buen traje de aguas para no ir tan tieso la próxima vez y divertirme más 🙂INXS! en el puerto de Roses

A la mañana siguiente, por supuesto soleada y calentita, pasé a despedirme del INXS! antes de volver al trabajo… no será la última 🙂

Y ahora  un poquito de vídeo que es como se ve mejor.


Sep 26 2009

Gregal en la Costa Brava

El miércoles subo a Llafranc con Aitor y nos encontramos con Jordi. Hemos quedado para subir un velero a Rosas, El Rebufff, un Archambault A35.

Lleva varios días soplando Tramontana y hay un mar ya establecido de proa que nos va a acompañar buena parte del viaje, al menos hasta pasar Cap de Bagur. Por eso nos enfundamos los pantalones de agua ya en el puerto, aunque aún hace bastante calor.

Gregal de unos 18 nudos con rachas de 20 ya a la salida del puerto. Izamos una mayor de dacron para transporte, y un foque 3 que debe ser de kevlar o algo así. El barco corre que se las pela, y aunque llevamos bastante vela para el viento que hace, se aguanta bastante bien. Jordi me dice que es debido a la relación lastre-desplazamiento, que en este caso es del 40%. O sea, que tiene mucho peso en el lastre y poco encima de cubierta. Eso hace el barco más seguro y más cómodo porque no escora tanto.

Poco más de cuatro horas para plantarnos en Rosas. Os dejo unas imágenes.