Jun 27 2010

Abarloarse en alta mar

Hoy hemos salido a dar una vuelta a vela pero lo cierto es que casi no hacía viento y apenas nos movíamos a  un par de nudos. Nos hemos cruzado con Hechicero, un Sun Fast 52 del CV Mataró, habitual en las regatas de club. Para poder intercambiar unas cervecitas calientes por otras frías, nos hemos abarloado, aprovechando el mar en calma.

Hemos compartido risas, un baño con agua fresquita y la sombra de su enorme vela mayor, que se agradece en días de tanta calor y calma chicha.

Para abarloarnos hemos colocado todas las defensas en la banda correspondiente y hemos amarrado dos largos de proa y popa, no muy tensos para dejar un poco de libertad de movimiento a los dos veleros y librar de esfuerzos innecesarios. Ha sido fácil con un velero tan grande; con otro de nuestra misma eslora supongo que hubiese sido mejor dos esprines o dos amarras al través para repartir los esfuerzos. Al tratarse de esloras distintas, no había peligro de que las crucetas o el palo se enredasen, pues quedaban a suficiente distancia el uno del otro.

Para bañarnos, por supuesto, un cabo largado por popa y la escalera de baño abajo. Es curioso como a pesar de parecer que están parados, los barcos se alejan en cuanto te despistas unos segundos. ¿No queremos acabar como los protagonistas de esta película, verdad?


Jun 26 2010

¿Qué supondría un vertido de crudo en nuestras costas?

Imagen del vertido de crudo del Golfo de México superpuesta sobre un mapa de CatalunyaHe encontrado esta web, donde Paul Rademacher utiliza las capacidades de Google Earth para ofrecer una visión del vertido de petróleo del Golfo de México que nos permite comparar su magnitud. Introduciendo el nombre de cualquier parte del mundo superpone una imagen con la extensión de la mancha sobre el mapa de dicha zona.

Así podemos ver que ésta es mayor que la comunidad de Madrid, o que, en caso de ocurrir en la costa catalana, habría afectado a toda ella. Desde Cap de Creus hasta el Delta del Ebro y en el momento de escribir estas líneas estaría llegando a las Baleares.

Te imaginas hacer una travesía a las islas nadando en un mar de aceite y petróleo viscoso que mata toda vida, que se adhiere al casco, que contamina las costas durante decenas de años. El turismo, la pesca, la vida… desastre ecológico… desastre económico… desastre de nuestra gestión del planeta!

A mi me ha impresionado esta imagen. Creo que debe hacernos reflexionar sobre algunas cosas. Debemos replantear algunas prioridades antes de que sea demasiado tarde. ¿Tú qué piensas?

ACTUALIZACIÓN (03/julio/2010)

Esta mañana he leído esta noticia sobre un vertido en Tarragona en El País.
Está ocurriendo delante de nuestras narices, en la costa de Tarragona y frente al Parque natural del Delta del Ebro y, por supuesto nadie decía nada!
O espabilamos con las energías renovables o nos quedan cuatro días mal contados.


Jun 6 2010

Sacando partido de las condiciones durante la regata

Pues aprovechando que es domingo, que está lloviendo y no hace casi viento, hemos pensado que lo mejor que podía hacerse es… salir a navegar 🙂

Regateando con lluvia

Así que en cuanto el comité ha anunciado que entraba algo de viento hemos salido a una milla y comenzado a preparar las velas.

Cuando el viento está tan suave, el trimado correcto de las velas se vuelve algo crítico. Una escota cazada un centímetro más de la cuenta altera inmediatamente el rendimiento. Ajustando bien la mayor y recogiendo el lazy-bagTrapa, escota, carro, balumero, pajarín… todo debe ajustarse al milímetro para sacar la máxima potencia y lograr que las 8 toneladas del barco empiecen a tomar velocidad y generar viento aparente.

No estábamos todos los habituales y se ha sumado algún velero nuevo (¡Bienvenido Be Water!). Como el viento no estaba muy definido se ha propuesto un bastón barlovento-sotavento de 1,5 nm y se ha dado la salida, con 15 minutos de retraso para esperar a un rezagado.

Hoy no ha sido necesario trabajar con los datos del plotter –algún día escribiré un post sobre el uso que se le puede dar en regata a un plotter de barco de crucero o un GPS de mano– La boya estaba casi a la vista y los cálculos eran sencillos de hacer a ojo.

Be Water, nuevo en la ciudad y dispuesto a dar guerraCondiciones ideales para Tete

Así que hemos ido haciendo esos cálculos a ojímetro, tratando de mantener la velocidad, porque cuando está tan flojito, parar el barco significa perder muchos metros hasta que vuelve a arrancar. Poco antes de llegar a la boya de barlovento, una rolada del viento nos ha obligado a hacer un último bordo y casi, casi no podemos pasar la boya. Orzando al límite, casi a punto de acuartelar el génova hemos conseguido pasar, aunque a costa de dejar el barco casi parado.

Mentha, no se pierde una.Hemos continuado el tramo de «bajada», pero el viento al rolar se ha convertido en un través, que no acababa de ir bien ni con el spi, ni con el génova. Hay que sacar el máximo partido a las condiciones y al material disponible, así que todos haciendo banda a sotavento para escorar un poco el barco y hemos alargado todo lo posible el bordo de Br, manteniéndonos en la zona de viento. Nuestra virada ha sido más a barlovento que nadie y a medida que nos acercábamos a la boya parecía que íbamos a recoger los frutos de nuestra estrategia, pero, el viento cerca de tierra rolaba progresivamente a favor del resto de la flota y no hemos recuperado nada de lo previsto 🙁

Viento intermitente...

La siguiente remontada al viento ha permitido a algunos usar el asimétrico, otros el génova y alguno el spi, depende de la zona había un viento u otro. La verdad es que ha sido un día atípico, nublado, con poco viento, con cortinas de agua intermitente y que al final nos ha planchado dejándonos planchados sin viento… ¡por 15 minutos! que es lo que nos ha costado recorrer el último cuarto de milla, prácticamente empujados por la corriente.

¿Qué he aprendido?

  • Lo de mantener la concentración es válido para días con viento pero lo es aún más para los días flojos.
  • En estos días la modificación de pesos sobre el barco (hacer banda) es crítica. Un mal movimiento puede parar el barco… y  vuelta a empezar.
  • Un cm hace la diferencia al ajustar velas.  A menudo hay que adaptarse a los roles cazando un dedo, amollando dos, volviendo a cazar. Cada vez que las lanitas «cantan» te están pidiendo que actúes.